Resulta paradójico que gentes que lucharon y luchan por sus derechos civiles, sociales y laborales, luego no contemplen la falta de estos en la libre elección de las mujeres gestantes de los hijos de los otros.
Hagamos memoria; Paco el Bajo, uno de los protagonistas de Los Santos Inocentes (La extraordinaria y lúcida obra de Miguel Delibes posteriormente llevado a la pantalla por Camus convirtiendo su historia en una joya no sólo artística, también social contando a generaciones venideras de dónde viene la mitad de nuestro país, película que está en la memoria colectiva de cualquier aficionado / A al cine de nuestro país), es grabado en la escena en la que «el secretario» olisquea las perdices como un perro leal en las batidas de caza: «Ni el perro más fino te haría el servicio de este hombre». Él actúa con la libertad que le da el conocimiento de la clase, él es el oprimido que necesita los haberes que le proporciona el señorito Iván. En la gran escena en la puerta de La Raya, cuando don Pedro les pide los servicios de Nieves, Regula y Paco aceptan con libertad que su hija no puede formarse y salir del círculo de «Un mandar que para eso estamos». En otro de los diálogos de la película el médico en el Iván: «Tuya es la burra» ante un accidente laboral de Paco el Bajo que el impide olisquear perdices en una partida y que puede dejarle, si sale a la partida, graves secuelas Irreversibles en su vida futura. Obviamente se puede defender que Paco el Bajo actúa con libertad sin contemplar sus necesidades, su presión o sus limitaciones todas las cosas que quedan patentes en el relato.
Podemos afirmar que la obra de Delibes está ubicada en un espacio temporal que no tiene que ver con la España de hoy … ¿seguro? A las camareras de hotel se les pagan 20 céntimos por cama hecha … digo yo que ¿habrá alguien que dude de su libertad ?, los repartidores de Deliveroo trabajando como falsos autónomos, obviamente también los hijos libres, al igual que en la nueva economía neoliberal que Se encuentra aquí, impiden los salarios dignos en la que los jóvenes titulados / como que trabajan con categorías inferiores a su calidad que realizan un trabajo y una responsabilidad en las instituciones públicas (que pagan con nuestros impuestos) . Ellos y ellas quizás no hay ningún tipo de ser padres para el futuro que diseñan las personas tienen un plan de vida,
En el caso que no ocupa solo el argumento a la libertad de las mujeres, (aquí el paradigma continuo) las mujeres oprimidas solo por el hecho de ser mujeres contemplan con gran felicidad la libertad de dar vida, dar vida a los niños y hijas de los Otros, los niños y las hijas de las mujeres que retrasaron su maternidad por el ascenso social o profesional, los hijos y las hijas de las mujeres que no quieren pasar las dificultades de un embarazo y parto decidiendo sobre el presente y el futuro posible La mujer gestante y el hijo de esta por «Tuya es la burra».
Al humanista que fue Miguel Delibes crítico con la verdadera sociedad devastadora que sacrifica todo lo humano en aras del consumo no se le ocurrió la pesadilla, pero hoy yo, una niña que pariendo al hijo de doña Pura.